Pluma Estilográfica Montegrappa Calligraphy

Montegrappa Calligraphy

Desde sus remotos orígenes hace aproximadamente unos 5.000 años en las áreas geográficas de Egipto, Mesopotamia y China, la escritura se constituyó en un instrumento esencial para el avance y desarrollo de la civilización por su trascendental papel en la transmisión y la pervivencia de las más variadas ideas y conocimientos, las creencias y, en general, del acervo cultural humano acumulado durante siglos, pero también de aspectos más mundanos como las transacciones comerciales, las relaciones diplomáticas o, simplemente, la comunicación entre particulares.

Tras unos titubeantes momentos iniciales en los que ésta se componía de pictogramas, la escritura fue derivando hacia sistemas fonéticos que, a diferencia de sus antecedentes más inmediatos, permitían plasmar conceptos abstractos, pronombres, tiempos verbales… A esto se sumaría una interesante evolución en la que se pasó de formas sencillas como la escritura cuneiforme a fórmulas más elaboradas que acabarían por añadir en muchos casos, a la citada dimensión conceptual, una vocación estética que iba más allá del simple hecho comunicativo.

Buena muestra de este papel artístico de la escritura se puede encontrar en la cultura islámica, en la que, ya desde la Edad Media, encontramos innumerables ejemplos en los que, además de en sus cada vez más ricos manuscritos, confeccionados con rudimentarias plumas y tintas de colores, ésta se fue trasladando igualmente a sus monumentos más celebrados como un elemento decorativo más, un vehículo para la transmisión de ideas políticas, filosóficas o religiosas que aspiraba además a alcanzar un cometido estético con hermosos pasajes incorporados en las yeserías, azulejos e incrustaciones en madera y piedra que pueblan con profusión techos, vigas o lienzos murales de mezquitas y recintos palaciales de la talla de la Alhambra de Granada.

Es a esta segunda vertiente de la escritura y, más en concreto, a la caligrafía árabe, a la que pretende rendir tributo la prestigiosa firma italiana Montegrappa con una impresionante pieza de edición limitada: la pluma estilográfica Montegrappa Calligraphy.

Para el diseño y elaboración de este espectacular instrumento de escritura, Montegrappa ha contado con la colaboración de la artista y diseñadora libanesa Katya Assouad Traboulsi. Nacida en 1960 y radicada en Dubai, desde 1986 la obra de esta reconocida creadora ha sido expuesta con gran éxito en ciudades como París, Londres, Nueva York, Washington o Ciudad de México, entre muchas otras.

Su propuesta para esta primorosa estilográfica consiste en un suntuoso cuerpo elaborado con plata esterlina sobre el que se encuentra grabada, con el singular atractivo que caracteriza a la delicada caligrafía árabe, una frase que resume espléndidamente la importancia de la palabra escrita en la historia de la humanidad: “La escritura transmite el conocimiento a través del tiempo”.

Por su parte, el motivo ornamental elegido para su soberbio capuchón es el del arabesco, recurso decorativo compuesto de tracerías, roleos y elementos vegetales que ha gozado desde siempre de gran implantación en el arte islámico y cobra aquí nueva vida con notable elegancia y exquisito refinamiento, tanto en el espléndido medallón de plata calada que lo corona como en el resto de su superficie, animada por un precioso patrón arabesco de entrelazos realizados con madreperla blanca, roja y verde.

Este delicioso motivo ornamental se repite igualmente en su portentoso plumín, un extraordinario elemento fabricado en oro macizo de 18 quilates con un bello acabado bicolor que, haciendo honor al objeto de su homenaje, se encuentra a disposición del público en una amplísima gama de grosores que van desde el Extrafino (EF) al Extragrueso (BB), pasando por el Fino (F), Medio (M), Grueso (B), los oblicuos medio (OM) y grueso (OB) o, finalmente, el Stub 1.1. Una enorme variedad de puntos que hará las delicias de los aficionados más expertos y exigentes.

Se presenta en un bonito estuche ornamentado con dorada caligrafía árabe sobre un llamativo fondo rojo que, a su vez, alberga en su interior una magnífica caja de madera elaborada a mano que protege la pluma y añade un nuevo toque de distinción, y un bello presente consistente en una edición especial con tapas duras de la obra “Arabic Calligraphy: words made precious”.

La estilográfica Montegrappa Calligraphy sale al mercado en una edición limitada restringida a tan sólo 328 unidades en todo el mundo, exiguo número por el que se ha optado por tratarse de la fecha de elaboración atribuida al primer documento escrito en dialecto árabe que ha llegado a nuestros días. Un último guiño simbólico en una obra de ensueño al alcance de unos pocos privilegiados.